Sentía que no podría soportarlo.Tal vez no era verdad...
Se había marchado robándole el corazón y todas las ilusiones. En su mano, aquella última rosa languidecía sin haber llegado a su destino.
Respiró hondo, contemplando las tenues luces del canal mientras pasaba por debajo del puente el último "vaporetto". De repente clavó su mirada en unos ojos que le observaban desde la cubierta. Intentó seguir su rastro mientras pasaba por debajo de aquel puente en medio de la oscuridad.
De entre sus manos se escapó la rosa que cayendo suavemente fue a posarse en las manos de aquella desconocida.
Tal vez era su "sino", seguir esperando que en un nuevo anochecer aquellos ojos profundos compartieran junto a él un maravilloso panorama desde el puente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario